Las mejores esencias se guardan en frascos pequeños y en el viejo continente es un lema que viene como anillo al dedo. A lo largo de los últimos 500 años han existido demasiados conflictos que han supuesto cambios de fronteras debido a invasiones, absorciones o separaciones sangrientas. La lista de estados o naciones es amplísima y muestra de esas diferencias culturales e intereses económicos o estratégicos, han surgido por motivos religiosos, étnicos o culturales muchas divisiones, especialmente en el siglo XX. Por si todo esto no fuera suficiente, Europa goza de una rareza mundial y son los microestados dentro del continente sin necesidad de ser una pequeña isla apartada como en el resto del mundo muestra de su legado feudal. En el artículo siguiente. nos centraremos en visitar los microestados europeos en un día o más, un viaje por las 6 naciones soberanas (Además de alguna micronación) que componen el puzzle del viejo continente. ¿Cuáles son los microestados europeos que se pueden visitar? ¿Qué micronación cuenta con régimen especial de visitas?.
Visitar los microestados europeos
Afortunadamente he podido completar la lista y he visitado todos los microestados europeos. Por ese motivo, en éste artículo, os mostraré qué ver en cada uno de ellos y un link en los que tenga información adicional para que puedas informarte acerca de su visita ya que muchas se pueden ver en tan solo un día.
Ciudad del Vaticano
Antiguo heredero de los Estados Pontificios que ocupaban una demarcación importante antes de la existencia de Italia, estas tierras eran gobernadas directamente por el papa. Sus 0,44 km cuadrados son suficientes para entender que en el tamaño no se encuentra la belleza. En éste Estado teocrático, donde la tasa de natalidad es igual a 0, La Capilla Sixtina, la Basílica de San Pedro o la posibilidad de acudir a una audiencia papal en el Vaticano son planes a realizar sí o sí en este diminuto enclave situado en Roma. ¿Cómo la Iglesia permitió que Italia le quitase el poder político? A través del Tratado de Letrán en 1929 entre la Santa Sede y el gobierno italiano, el Papa reconoce la soberanía de Italia sobre los territorios pontificios a cambio de reconocer la ciudad del Vaticano y que Italia adopte la religión católica como la oficial de su Estado. Afortunadamente he tenido el placer de visitar el Vaticano en 4 ocasiones, la última en un inolvidable viaje a Roma en verano.
Mónaco
El segundo país más pequeño del mundo es un oasis de glamour, lujo y riqueza. Rodeado de impresionantes aguas azules en plena costa mediterránea, la monarquía gobierna un país cuyo Casino y circuito de F1 atrae a millones de turistas de todo el mundo. Es un lugar muy agradable para pasar varias horas caminando por sus calles y visitando alguna de las tiendas más caras del mundo al igual que visitar la playa de Larvotto y el Puerto Hercule. Aunque no seas un experto en el juego, poder apostar algo en el Casino de Montecarlo es una actividad interesante, tal y como hice en Macao o Singapur, otros dos lugares clave para los amantes del juego. A pesar que es el hogar de los multimillonarios debido a un tema de impuestos, la visita a Mónaco no es excesivamente cara. Al igual que El Vaticano, en un día podrás hacerte una idea bastante interesante de lo que el país puede ofrecerte. En lo que respecta a mi última visita fue hace ya bastantes años en una escala de crucero, es tiempo de volver a la costa azul.
San Marino
Aprovechando un viaje recorriendo los pueblos más bonitos de la Toscana, decidí acudir a Bolonia para tener la oportunidad de visitar el que probablemente junto a Liechtenstein sean los dos microestados más olvidados por los viajeros. La República constitucional más antigua del planeta es al igual que el Vaticano otra rareza que sobrevivió a la unificación de Italia. Como curiosidad, desde las laderas del Monte Titán, casi al finalizar la Segunda Guerra Mundial y estando rodeado por Italia osaron declararle la guerra a la Alemania Nazi, os lo explico aquí qué ver en San Marino. Sus estrechas, empinadas, empedradas y peatonales calles, las vistas al mar desde lo alto del monte, la Piazza della Liberta y los castillos son el mayor atractivo del país que también puedes visitar en tan solo un día. Se trata de un destino Patrimonio de la Humanidad único y atractivo, no dejes de visitar la Serenissima.
Liechtenstein
Entre Austria y Suiza encontramos el Principado de Liechtenstein. Ha sido el último microestado que he visitado y quedé auténticamente maravillado con su paisaje alpino. Como dato a tener en cuenta, es uno de los países con mayor PIB del mundo muy dependiente de su vecina helvética por los que los precios si que son bastante elevados. En mi caso particular, no estaba tan interesado en los deportes de invierno por lo que mi visita en verano se centró a visitar Vaduz (Su capital) y el resto de pueblos que conforman el país además de su majestuoso Castillo donde hoy en día reside el jefe del Estado. No dejes de visitar las bodegas reales y degustar el vino del Príncipe. Si deseas tener más información no te pierdas Viajar a Liechtenstein o qué ver en Vaduz.
Malta
Malta es un auténtico paraíso mediterráneo repleto de historia y civilizaciones que han intentado y conseguido conquistarla, desde la corona de Aragón hasta el Imperio Británico. Alo largo de los siglos sus tres islas Malta, Comino y Gozo han sido lugares de disputa debido a su localización. El país más pequeño de la Unión Europea, cuenta con playas de arena y agua cristalina (Especialmente en Comino), templos megalíticos de Ggantija en Gozo y arquitectura del extinto Imperio Veneciano en La Valetta y otras poblaciones de la isla mayor, Malta. Hogar de la Órden de Malta (más adelante os hablamos de ello), explorar la antigua capital Mdina supone un auténtico viaje en el tiempo. Al igual que el Vaticano la he visitado en numerosas ocasiones, feliz de saber que tengo un billete para las próximas fechas a uno de mis rincones europeos favoritos. Más información aquí.
Andorra
Paraíso de los amantes de la naturaleza, esta monarquía electiva al igual que Liechtenstein es conocida por sus estaciones de esquí y sus oportunidades de trekking y senderismo. Situado entre España y Francia en una ubicación excepcional en los pirineos, cuenta con el catalán como lengua oficial aunque el castellano y el francés son hablado por la mayoría de la población. Mi visita en el último año del pasado milenio fue para visitar el balneario de Andorra y conocer su capital además de hacer compras libres de impuestos.
Otras naciones consideradas microestados o micronaciones
¿Te preguntas dónde está Luxemburgo? Oficialmente no es considerado un microestado europeo por lo que a continuación os escribiré sobre varios lugares que considero interesantes introducir por diversos motivos como puede ser el tamaño, su amplía autonomía o régimen jurídico especial.
Luxemburgo
El único Gran Ducado del mundo es uno de esos microestados (Si se permite la expresión) que al igual que Malta merece mucho más tiempo de un día. Situado entre Francia, Alemania y Bélgica es el hogar de muchas funciones e instituciones de la Unión Europea. El centro histórico de la capital merece ser recorrido tanto por la superficie como los túneles subterráneos (Casamatas del Bock) construidos durante el tiempo de los españoles, tal fue la obra de ingeniería que hicieron en el siglo XVII que fueron utilizados 300 años más tarde como refugio durante la Primera y Segunda Guerra Mundial. Como os comentaba, más allá de la capital podrás recorrer la región de Mullerthal conocida como Pequeña Suiza para caminar por sus parajes naturales y frondosos bosques. Bañado por el río Mosela, sus fértiles tierras son utilizadas por la población rural para el cultivo y la cría de animales. No olvides visitar el Castillo de Vianden además de degustar los vinos nacionales del país. Por cierto, muy próxima a Ciudad de Luxemburgo se halla Trier (Tréveris, tercera ciudad en importancia en tiempos de los romanos) y cuenta con muchos Patrimonios de la Humanidad, la ciudad natal de Karl Marx merece una visita. Más información: Visitar Ciudad de Luxemburgo.
Orden de Malta
Probablemente te sorprenda la inclusión de la Soberana Orden Militar y Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, Rodas y Malta en este artículo sobre microestados y sería más bien una micronación aunque hay que tomarlo con pinzas. A pesar que no es reconocido como estado propio, se da la paradoja que Italia reconoce la extraterritorialidad de la sede de la Orden de Malta en Roma estando además reconocida internacionalmente por las naciones como un sujeto de derecho internacional. Cuenta con relaciones diplomáticas con más de 110 países y es observador permanente en las Naciones Unidas. Fundada en el siglo XI, hoy en día emite sus propios pasaportes, sellos y matrículas ejerciendo con un ordenamiento jurídico propio. Durante un tour en Fiat 500 por Roma llegamos a la puerta de entrada a la sede donde a través del hueco de la antigua cerradura podemos observar una de las vistas más hermosas que puedan verse a través de un minúsculo espacio.
Monte Athos.
La verdad es que no sé como determinar al Monte Athos si un microestado europeo, una micronación o un estado con autonomía (casi) total pero sin reconocimiento internacional. Seguramente desconozcas la existencia de «un Vaticano ortodoxo» situado en Grecia donde las fronteras inexistentes del espacio Shengen no se aplican y las mujeres (además de los animales femeninos) tienen prohibida su entrada. El Monte Athos es una auténtica rareza feudal donde es una auténtica odisea poder ingresar debido a que no está enfocado al turismo y los monjes que habitan son muy estrictos. El Monte Athos se ha mantenido a lo largo de los siglos como un lugar de peregrinaje para los monjes ortodoxos provenientes de muchos países, especialmente de Rusia. Tal es su excepcionalidad que durante la II Guerra Mundial reconocieron a Hitler «Alto Protector de la Montaña Sagrada y el Faro de Aegean» evitando así la destrucción de sus templos milenarios y centenarios manteniendo el patrimonio intacto. La existencia de esta monarquía electiva viene dada por una bula de oro emitida por la cancillería imperial de Constantinopla declaró el monacato para los monjes. . Por último, el gobierno autónomo de Athos cuenta con contactos con el Ministerio de Exteriores de Grecia y como curiosidad, cuentan con el calendario juliano y no el gregoriano como el resto de países europeos. Por lo tanto, si eres hombre, puedes ingresar en un lugar para sentirte un viajero atemporal pues muchas de las leyes promulgadas en el siglo X en este recinto se encuentran vigentes. ¿Te animas a visitar el Estado Monástico?.