Cierra los ojos, camina despacio y sumérgete en un lugar nuevo. Un lugar con luz tenue, con una bohemia iluminación a base de velas y una decoración que te recuerda a las mil y una noches… Sensaciones que te transportan en el tiempo, a un auténtico Hammam de Oriente.
Esto fue lo que sentí cuando entré en el Hammam Al Ándalus de Madrid.
Desde que un viaje a Costa Rica me hizo cambiar mis hábitos de vida saludables, busco cada mes o cada cierto tiempo, mimar mi cuerpo y mente. En enero de 2017, después de las reuniones de Fitur, decidí relajarme en el Hammam Al Ándalus de Madrid horas antes de coger mi tren para Alicante.
En países musulmanes, todas las clases sociales tienen por costumbre ir al hammam cada semana o con bastante frecuencia, entonces ¿por qué no adquirir esas costumbres en occidente? Todavía recuerdo cuando en Estambul, allá por 2010 visité mi primer Hammam. Era la única turista de toda la sala y me pareció la mejor manera para limpiar mi piel y relajarme. Allí me contraté una limpieza de cuerpo para eliminar las pieles muertas. Un tratamiento que se parece bastante al del baño y Kessa tradicional que tienen en el Hammam Al Ándalus. Yo esta vez elegí el baño con masaje de aceites, buscaba nutrir mi piel y relajarme.
El hammam es un lugar perfecto de relajación, dónde consigues revitalizarte antes de enriquecer tu piel con un masaje de aceites esenciales.
Experiencia en el Hammam Al Ándalus de Madrid
Mi experiencia en el Hammam Al Ándalus de Madrid fue sorprendente. La decoración es exquisita y adentrarme en ese espacio me hizo viajar en el tiempo. Sentí que me encontraba en otro lugar del mundo dónde en seguida conseguí desconectar de mi ajetreada vida.
Pequeñas velas colocadas en rincones y tragaluces en forma de estrella dan una iluminación tenue que te lleva a un estado de relajación máxima.
El hammam Al Ándalus está diseñado con la misma filosofía y arquitectura que cualquier otro hammam de oriente. Tiene 3 salas compuestas por 3 zonas amplias de agua. Una fría, una templada y una caliente. Además también tiene una sauna turca o “vapor de hammam” dónde el aire se transforma en vapor. Esta sala permite dilatar los poros de la piel y limpiarla en profundidad. Esto es ideal para preparar tu piel antes del masaje de aceites.
El hammam, también tiene un sala de relajación con un té riquísimo. Puedes servirte la cantidad que quieras. Ese té me recordó al té que tomé en Fez, Marruecos. La sala de relajación tiene 4 placas de madera que te describen las propiedades que tienen los 4 aceites que tienes para elegir para el masaje. En función de si buscas relajarte, tonificar o hidratarte la piel te vendrá bien el aceite de Lavanda, de Rosas, Violetas o Ambar Rojo. Desde este enlace puedes conocer las propiedades de estos aceites esenciales. También en esa sala puedes oler los 4 aceites, por lo que si no te decides por cual coger, prueba a inspirarte con sus aromas.
El masaje puedes elegirlo en solo espalda, solo piernas o ambos. Si tienes molestias en la espalda o piernas cargadas por el deporte yo elegiría solo esa zona. Si no es el caso yo elegiría la combinación de espalda y piernas. Estos aceites son muy nutritivos para la piel y de esta manera consigues hidratar o tonificar más zonas de tu cuerpo.
Reservar/Ofertas Hammam Al Ándalus Madrid.
Yo escogí el Baño + masaje relajante de 30 minutos por 70€ (también hay de 15 minutos por 55€ pero creo que se queda un poco corto). Desde este enlace puedes ver los precios de todos los circuitos con sus masajes. Yo estuve en el de Madrid, pero también tienen en Granada, Córdoba y Málaga. En Madrid se encuentran en pleno centro en la calle Atocha, número 14.
Beneficios del hammam.
Mi mayor propósito en este tipo de experiencias, no es desconectar sin más de mi rutina diaria si no aportarle a mi cuerpo todos los beneficios posibles. A continuación te detallo los beneficios del Hammam y algunos consejos para que en el Hammam Al Ándalus de Madrid aportes lo máximo a tu cuerpo.
- Métete un tiempo en la sauna de vapor porque el vapor dilata los poros y ayuda a eliminar toxinas. Hazlo preferiblemente antes del masaje de aceite.
- Si estás congestionado o resfriado, la sauna de vapor te hará un efecto expectorante.
- Pasar una hora y media entre baños calientes disminuye el estrés. Después del baño sales muy relajada.
- Si te atreves, la piscina de agua fría ayuda a tonificar. Yo conseguí meterme y estar unos minutos. Notas como la piel se tersa.
- Te aconsejo como último baño, la piscina caliente para irte relajada. Acuérdate de darte una pequeña ducha fría antes de subir a los vestuarios para que no te de una bajada de tensión.
¿Desconectamos del móvil?
Todas las fotografías de este artículo son propiedad del Hammam Al Ándalus de Madrid. No está permitido el uso de móviles dentro del Hammam. Esta medida me parece muy acertada por dos motivos. El primer motivo es por nosotros mismos. El Hammam debe ser un lugar para desconectar mente y cuerpo. Ya vivimos demasiado conectados a los móviles. Perdemos tiempo fotografiando y publicándolo en redes, viviendo la experiencia a través de un objetivo en vez de a través de las sensaciones. El segundo motivo es para preservar la intimidad o derechos de las personas que hay el hammam.
Dedícate a disfrutar del momento y a regalarte 1:30h de desconexión de tu vida. Tu mente te lo agradecerá.
Si buscas más experiencias relajantes por el mundo y vas a viajar a Budapest en verano o en invierno, te aconsejo que elijas entre el balneario Gellert o Szechenyi o le eches un vistazo a nuestra experiencia en el Balneario Széchenyi de Budapest, un gigantesco balneario con aguas termales tanto exteriores como interiores. Puedes relajarte mientras ves el atardecer o juegas a una partida de ajedrez con los locales del lugar.